La cáscara de almendra es una alternativa excelente no solo a los combustibles fósiles, sino también a los pellets. Es un tipo de biomasa poco conocida, por eso en este artículo veremos sus propiedades, precio, fabricación y usos.
Propiedades de la cáscara de almendra como combustible de biomasa
Las almendras presentan dos tipos de cáscaras cuando están en los almendros. La cáscara exterior es verde con textura algo similar al terciopelo. Una vez que las almendras se recolectan, se les quita esa cáscara verde y en el interior se encuentra una cáscara dura de textura que puede recordar la de la madera. Esta es la que se usa como combustible.
De todas las propiedades de la cáscara de almendra, las más interesantes para entender su comportamiento como combustible son el poder calorífico, la humedad y el contenido en cenizas.
Poder calorífico
Una de las razones por las que la cáscara de almendra es una alternativa al pellet es por su poder calorífico. El poder calorífico inferior (PCI) de la cáscara de almendra es de 3940 kcal/kg, mientras que el de los pellets es de 4180 kcal/kg. Hay poca distancia entre ambos valores.
Humedad
La humedad de la cáscara de almendra está entre el 10% y el 15%. Los pellets, sin embargo, tienen una humedad entre el 4% y el 8%. En esta característica el pellet de madera es mejor porque interesan los combustibles con la menor cantidad de humedad posible.
Contenido en ceniza
El contenido en ceniza medio de la cáscara de almendra es del 1,1%. En el caso de los pellets de madera, el contenido en ceniza debe ser igual o inferior al 0,7% para los pellets de mayor calidad. Para el resto de calidades, el contenido en cenizas será un 3% como máximo.
El precio de la cáscara de almendra
Las cáscaras de almendra se presentan en dos formatos: enteras y trituradas. Las cáscaras enteras se utilizan para grandes industrias, mientras que las trituradas van destinadas a uso doméstico y empresas pequeñas.
Una forma de vender las cáscaras de almendra son bolsas de 15 kg. La bolsa de cáscara entera tiene un precio de unos 4,5€, mientras que la bolsa de cáscara triturada tiene un precio aproximado de 6€. El saco de 15 kg de pellets tiene un precio en el entorno de los 7€.
Estos precios que aquí presentamos varían con el tiempo, por eso siempre aconsejamos que no se tomen al pie de la letra. Simplemente sirven para hacernos a la idea de que la cáscara de almendra es más barata que los pellets de madera.
Fabricación de briquetas con cáscara de almendra
La cáscara de almendra puede encontrarse a la venta de varias formas. Las cáscaras pueden estar enteras o trituradas, como describimos en el punto anterior. También pueden en polvo o en forma de briquetas. La fabricación de briquetas de cáscara de almendra no es algo que se estén haciendo a nivel industrial. Se trata de un método de fabricación ideado en la Universidad de Alicante. Hemos visto este método interesante y por eso nos interesa describirlo.
Las cáscaras que se recogen son las que salen de las instalaciones partidoras de almendras. La humedad de las cáscaras en este punto está entre el 11% y el 15%. Lo primero que se hace es un cierto triturado de la cáscara con el fin de obtener una materia prima más homogénea.
Después se lavan las cáscaras durante 3 minutos con agua a 180ºC. El siguiente paso es humedecer las cáscaras, con lo que su temperatura disminuye y su humedad aumenta hasta un 30%.
Ahora es cuando llega el secado de la materia prima, el cual se realiza en tubos, de los que las cáscaras salen con una humedad entre el 1% y el 2%. Dentro de los tubos, la cáscara alcanza una temperatura máxima de 140º. Después del secado es cuando la cáscara pasa a la máquina briquetadora, donde se le da la forma final.
La briqueta tiene una forma rectangular, con entrantes transversales en cada una de las caras laterales, adaptados para facilitar su combustión.
La fabricación de briquetas de cáscara de almendra no se está llevando a cabo a escala industrial, por ello es que su futuro está por ver.
Usos de la cáscara de almendra como combustible
Además de en calderas de biomasa domésticas e industriales, las cáscaras de almendras pueden servir como combustible en estufas adaptadas para este tipo de materia prima y para barbacoas domésticas.
Una de las finalidades de la síntesis de briquetas de la Universidad de Alicante es hacer más fácil su transporte y manejo y la adopción de un color final más parecido a los troncos de madera, con lo que la aceptación por parte de los usuarios sería mayor y dejaría de verse como un combustible raro.