Ahora que los combustibles respetuosos con el medio ambiente son tan utilizados, podremos encontrar estufas de pellets en muchos hogares. Hay tres tipos de estufas de pellets: las de aire, las estufas de pellets canalizables y las hidroestufas de pellets, también llamadas termoestufas.
Los tres tipos difieren en el funcionamiento. En este artículo nos centraremos en las hidroestufas de pellets. Veremos qué son, cómo funcionan, sus ventajas y sus inconvenientes.
¿Qué es una termoestufa de pellets?
Las hidroestufas o termoestufas son modelos de estufas que funcionan como pequeñas calderas e incorporan un sistema de calefacción para toda la vivienda. La estufa calienta el agua que se distribuye por toda la casa y se conecta a los radiadores o al suelo radiante. De esta forma se consigue que se calienten todas las habitaciones.
Aunque funcione en parte como caldera no hay que confundir ambas, ya que las calderas tienen una instalación más compleja, son más caras y ocupan más espacio. Otra diferencia es el aspecto estético, el cual es mejor en las estufas. Si te fijas en el aspecto de las estufas de pellets, verás que muchas de ellas son elementos decorativos, además de cumplir con su función calefactora.
La razón por la que se las denomina hidroestufas es porque sirven también para calentar el agua que circula por los radiadores o por una instalación de suelo radiante.
Diferencias entre una hidroestufa de pellets y una estufa de pellets tradicional
Para explicar las diferencias entre una hidroestufa de pellets y una estufa de pellets más tradicional, tenemos que conocer primero las principales características de ambos aparatos.
Características de las estufas de pellets
Tenemos estufas de pellets de dos tipos, que son las estufas de aire y las estufas canalizables. Las primeras calientan directamente el aire de la habitación y las segundas se pueden canalizar para llevar el calor a toda la vivienda.
Cabe destacar las siguientes características:
- Tienen autonomía de varios días, aunque todo depende mucho de su uso.
- Son ideales para viviendas pequeñas unifamiliares y para espacios diáfanos. De hecho se recomienda su instalación en espacios con una superficie de entre 25 y 100 metros cuadrados.
- Si se quiere instalar en un bloque de pisos, hay que pedir autorización a la comunidad de vecinos y estudiar cuál es el mejor lugar para colocar la salida de humos.
- El rendimiento de las estufas está entre el 70% y el 90%. Es buen rendimiento para espacios diáfano y estancias relativamente pequeñas.
Características de las hidroestufas
Las termoestufas tienen las siguientes características destacables:
- Tienen un precio más elevado que el de las estufas de aire debido a que sus prestaciones son mayores.
- Están diseñadas para estancias de hasta 230 metros cuadrados.
- Se pueden conectar con sistemas de calefacción compuestos de radiadores o bien conectarse con un suelo radiante.
- Están capacitadas para producir agua caliente sanitaria.
- Si contamos con una buena instalación, la eficiencia energética de las termoestufas oscila entre un 85% y un 95%.
Una opción interesante para considerar hoy en día es que las hidroestufas se pueden instalar con paneles solares.
Diferencia entre ambos sistemas de calefacción
Hay una diferencia básica entre las hidroestufas y las estufas de pellets tradicionales. Las estufas tradicionales calientan solo la habitación en la que están instaladas y lo hacen a través del aire. Las hidroestufas, en cambio, son capaces de calentar toda una vivienda conectándose al circuito de radiadores existente. Funcionan como si fueran calderas, ya que también pueden generar agua caliente sanitaria siempre que se instale en aparte un interacumulador externo.
La principal diferencia entre la hidroestufa de pellets y una estufa de pellets tradicional es el que la hidroestufa lleva un circuito hidráulico. Entre la estufa y el sistema de calefacción se instalarán válvulas antirretorno y válvulas de corte para aislarlos entre sí en caso de mantenimiento o reparación.
En la parte de atrás de las hidroestufas existen dos tomas hidráulicas correspondientes a la impulsión y al retorno de la calefacción. La parte de impulsión de la calefacción puede dividirse también en dos: circuito de calefacción y circuito de agua caliente sanitaria.
Esta parte está regulada por una centralita y opcionalmente puede haber una válvula de tres vías. La instalación se realizará de una forma u otra según si se quiere instalar solo calefacción o bien calefacción y agua caliente. En el circuito de retorno se instala el sistema para llenar la instalación.
Hasta ahora hemos visto la parte exterior. En la parte interior de la termoestufa es donde se encuentran los siguientes componentes hidráulicos:
- Vaso de expansión
- Válvula de seguridad
- Bomba impulsora
- Presostatos
- Termostatos
- Circuito de control
- Purgador
Las termoestufas necesitan una salida de humos y toma de electricidad. En esto son iguales al resto de los modelos de estufas de pellets. También es recomendable que no haya obstáculos en uno o dos metros alrededor de la estufa para que el calor llegue bien a todas partes.
Formas de instalar las hidroestufas de pellets
Las termoestufas de pellets pueden instalarse de tres formas, dependiendo de las funciones que tenga que desempeñar.
La forma más simple es la instalación que comunica la termoestufa con un circuito de calefacción. De esta forma, la estufa alimenta un circuito de calefacción a través de un intercambiador de calor que se encarga de transmitir el calor entre los circuitos primario y secundario.
Otra forma de instalación es cuando se quiere que la hidroestufa sirva tanto para calefacción como para agua caliente. En esta instalación, la estufa transfiere calor a los radiadores a través de un intercambiador de calor. Esto también lo teníamos en la instalación anterior. En esta, además, la estufa calienta el agua almacenada en el depósito de agua caliente mediante un serpentín. También se puede realizar la instalación con apoyo de una caldera.
¿Calderas de biomasa o hidroestufas de pellets?
Después de leer el apartado anterior, quizá te hayas preguntado qué diferencia existe entre las calderas y las hidroestufas. Una caldera sirve en los edificios para tener tanto calefacción como agua caliente, lo mismo que pueden lograr las termoestufas.
Y además, la termoestufa es más agradable a la vista, tanto por el diseño del aparato como por poder ver las llamas desde el exterior. Las estufas de pellets tienen una especie de ventana transparente para poder ver el fuego desde el exterior, lo cual recuerda a las chimeneas tradicionales.
Entonces, ¿cuándo se recomienda una caldera y cuándo una hidroestufa? La diferencia está sobre todo en la potencia. Aunque la potencia que ofrecen las hidroestufas es buena, todavía les falta mucho para igualar la potencia de las calderas. Por tanto, para una vivienda habitual, espaciosa y situada en zonas donde los inviernos son fríos, la caldera de biomasa siempre tendrá mejor rendimiento.
Si estamos en una vivienda no muy grande y con inviernos suaves, las termoestufas pueden ser suficiente. También son buena opción para segundas viviendas, en las que no se reside durante la mayor parte del año.
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